Material ideal para proteger, conservar y presentar alimentos y bebidas, el vidrio ofrece múltiples ventajas, incluyendo algunas poco conocidas. Es un fantástico aliado para el delivery y take away de bebidas y alimentos como zumos, batidos, gazpachos y sopas. De hecho, cada vez son más los restaurantes y cafeterías que apuestan por las botellas de vidrio en su servicio de comidas y bebidas para llevar por la facilidad de manipulación, claridad, rigidez y resistencia a altas temperaturas que ofrecen las botellas de vidrio.
El vidrio es inerte, es decir, que es químicamente estable, por lo que no contamina su contenido, ya sean alimentos, bebidas, medicamentos, etc. Además, es uno de los materiales más respetuosos con el medio ambiente por ser infinitamente y al 100% reciclable.
Friends of Glass (Amigos del Vidrio), la plataforma europea que apoya al envase de vidrio, ensalza su cualidad inerte poner de manifiesto sus beneficios no solo para nuestra salud, sino también para el cuidado de nuestro planeta:
Preserva el contenido y el entorno
Utilizado como envase desde el antiguo Egipto (2000 a.C.), el vidrio es íntegramente inerte lo que significa que no reacciona química o físicamente al contacto con su contenido o con su entorno. Debido a esta propiedad, no interfiere en las cualidades de los alimentos, no solo las organolépticas (aroma y sabor), sino también en la calidad y propiedades nutricionales, incluso para alimentos de larga vida. Es perfecto para transportar una amplia variedad de bebidas (vinos, refrescos, leche, zumos, cervezas) sin impactar en el sabor actuando como una óptima barrera con el exterior.
Asimismo, el vidrio no reacciona física o químicamente con el entorno ni libera contaminantes. Aun así, no hay que olvidar que siempre hay que depositarlo en el contenedor verde para aprovechar otra de sus ventajas, el reciclado integral e infinito.
Reciclado eficiente
El vidrio es impermeable y aséptico, lo cual favorece la integridad de su contenido, soportando el microondas así como altas temperaturas para esterilización, pasteurización o baño maría. Además, puede ser reciclado infinitamente sin alterarse y el hecho de contar con un contenedor específico (el verde) permite un reciclado de calidad.
El vidrio es el gran ejemplo de la economía circular ya que el material reciclado vuelve al mismo ciclo del que partió para volver a convertirse de nuevo en un envase.
Certificado de seguridad
Hasta el momento, el vidrio es el único material que ha recibido la certificación GRAS- (Generally Recognized as Safe), que avala los productos generalmente reconocidos como seguros por la FDA, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos. A nivel europeo, los envases de vidrio han sido exceptuados de la obligación de la normativa REACH de sustancias peligrosas, y varios laboratorios del mundo confirman la ausencia de lixiviación ni migración de los elementos que constituyen el vidrio (bisfenol A, ftalatos, acetiladehidos y otros productos potencialmente dañinos por ser persistentes).